Un nuevo estudio encuentra que la suplementación de 1 gramo diario de aceite de pescado reduce el dolor de artrosis. Este mismo estudio también ratifica a la dieta, la pérdida de peso y el ejercicio adaptado a la movilidad, como estrategias efectivas para el alivio de los síntomas de artrosis.
Aceite de pescado
En el estudio más amplio y actualizado de su tipo, investigadores de la Universidad de Surrey examinaron el vínculo entre la dieta y la autogestión efectiva de la artrosis.
En un análisis realizado a 68 estudios previos, los investigadores encontraron que la suplementación con dosis bajas aceite de pescado (el equivalente a 1 ½ capsula blanda estándar) podría reducir del dolor en pacientes con artrosis y a mejorar a la vez su salud cardiovascular.
La evidencia sugiere que los ácidos grasos esenciales contenidos en el aceite de pescado, reducen la inflamación articular, lo que ayuda a aliviar el dolor.
Pérdida de peso y ejercicio adaptado
La obesidad es un factor de riesgo que incrementa de manera considerable la carga articular, así como la inflamación sistémica de bajo grado en el cuerpo, agravando los síntomas de esta enfermedad.
En este mismo estudio también se encontró que la pérdida de peso en pacientes obesos o con sobrepeso y el ejercicio adaptado a la movilidad, también son efectivos para reducir los síntomas de la artrosis.
Restricción de calorías en pacientes con sobrepeso
Una dieta restringida en calorías, en combinación con ejercicios de fortalecimiento, flexibilidad y aeróbicos, se ratifica como un enfoque eficaz para reducir el dolor en pacientes con sobrepeso.
«La importancia de una buena dieta y ejercicio regular nunca debe subestimarse. No solo nos mantiene en forma y saludables, sino que como hemos aprendido en este estudio, también disminuye los síntomas dolorosos de la artrosis.
Somos lo que comemos y es importante que obtengamos de nuestros alimentos la cantidad correcta de nutrientes, para garantizar que los sistemas de nuestro cuerpo funcionen como deberían».
Margaret Rayman, profesora de medicina nutricional en la Universidad de Surrey
«La combinación de una buena dieta y ejercicio regular, es necesaria para mantener una buena salud articular, no se pueden tener articulaciones sanas solo con dieta o ejercicio, se necesitan ambos.”
Ali Mobasheri, profesor de Fisiología Musculoesquelética en la Universidad de Surrey.
Estilo de vida saludable
La adopción de un estilo de vida saludable también ayudara a reducir los niveles de colesterol en sangre. Estudios han asociado los altos niveles de colesterol con la artrosis.
“El estilo de vida también debe considerarse al intentar reducir el dolor de la artrosis. Los pacientes no pueden esperar milagros con intervenciones dietéticas si tienen sobrepeso y beben o fuman demasiado.
La evidencia muestra que fumar y beber en exceso afecta negativamente el metabolismo energético del cuerpo y los marcadores inflamatorios en el hígado, que promueven la inflamación y la enfermedad en el cuerpo”.
Ali Mobasheri
Vitamina K
Otro hallazgo del estudio relaciona el aumento de la ingesta de alimentos ricos en vitamina K, como col rizada, espinaca y perejil, con beneficios en pacientes artrosis.
La vitamina K es necesaria la asimilación de las proteínas dependientes de vitamina K (VKD), que se encuentran en el hueso y el cartílago. Una ingesta inadecuada de esta vitamina afecta negativamente las funciones de dichas proteínas, incrementando el riesgo de artrosis al interferir negativamente en el crecimiento y reparación ósea.
La artrosis es la forma más común de artritis en el mundo: el 18% de las mujeres y el 9,6% de los hombres de 60 años han sido diagnosticados con esta dolorosa condición. Sin embargo, es probable que cifras sean más altas que eso, ya que la carga global de la artrosis ha sido subestimada.
Para el año 2050 se estima que más 130 millones de personas sufrirán con artrosis, suponiendo una carga considerable para los servicios de salud en todos los países del mundo.
Actualmente no existe un tratamiento médico efectivo para la artrosis, y los protocolos de la medicina convencional solo disponen de analgésicos para tratar los síntomas.
Fuente
Thomas, S., Browne, H., Mobasheri, A., & Rayman, M. P. (2018). What is the evidence for a role for diet and nutrition in osteoarthritis? Rheumatology, 57(suppl_4), iv61-iv74. https://doi.org/10.1093/rheumatology/key011
